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EN LA XV EDICIÓN DE SU CONGRESO | |
La SEOM acerca la Oncología Médica a los estudiantes de Medicina | |
La sociedad científica destaca las posibilidades de investigación que aún siguen abiertas | |
José A. Puglisi. Madrid “En los últimos meses hemos reforzado la relación con los estudiantes, lo que permite que les ayudemos con temas que les preocupan, como, por ejemplo, en las técnicas para mantener una buena comunicación médico-paciente”, aclara Pilar Garrido, presidente saliente de la sociedad científica. En este sentido, han aprovechado la sesión SEOM-CEEM ‘Innovación en formación: construyendo por la Oncología del mañana’ de la XV edición de su congreso anual, para abordar esta asignatura pendiente.
Fernando Henao, médico adjunto del Hospital Universitario Virgen de la Macarena en Sevilla, ha recomendado a los estudiantes la implementación del método de Buckman al momento de tratar con un paciente. “Son seis pasos que, si se toman en consideración, permiten una comunicación directa y efectiva con el paciente”, apunta. Según la metodología, es necesario tener presente al momento de comunicar: el entono, generando un espacio de privacidad para transmitir la noticia y evitando las horas nocturnas para transmitir malas noticias; la percepción, conociendo cuánta información desea conocer el paciente; invitación, darle a entender que se le dará toda la información que considere necesaria; conocimiento, que debe ser transmitido en un lenguaje común y entendible; empatía, en el que se debe saber conectar con el paciente; y estrategia, definiendo cuáles son los próximos pasos a seguir. Henao apunta que los errores más comunes son: considerar a los familiares como principal interlocutor por encima del propio paciente; crear seguridades prematuras; presuponer el conocimiento del paciente; utilizar palabras de alto contenido emocional; comunicar con prisas; esquivar emociones; y dejar al paciente sin ninguna esperanza.Gema Patricia Ramírez, quien ha sido paciente de Henao, ha destacado que “cuando hay una relación de confianza mutua entre el médico y el paciente, es más fácil el proceso de comunicación, estableciéndose un nexo donde, a veces, sobran hasta las palabras”. Desde la consultaEl exvicepresidente del Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), Domingo A. Sánchez, ha propuesto que los alumnos puedan tener una mayor participación dentro de las consultas, viendo de primera persona cómo es la relación entre el médico con el paciente. “Creemos que la experiencia podría ser un extra a los aprendizajes teóricos”, precisa. Una postura que ha sido respaldada por Alfredo Carrato, jefe de Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid. “Es una oportunidad para que los alumnos puedan aprender de la dinámica del médico y cómo éste transmite la información al paciente, así como a sus familiares y al resto del equipo médico”, apunta.Ante la importancia de adoptar estas habilidades, Carrato ha indicado que el programa que desarrolló SEOM, y que está sirviendo de guía para la troncalidad, cuenta con áreas de formación en comunicación clínica, así como investigación, trabajo en equipo e idiomas. Investigación constantePor otro lado, César A. Rodríguez Sánchez, vocal de la junta directiva de SEOM, ha insistido en cómo los procesos de investigación han cambiado la lucha contra el cáncer, pasando de un modelo más general a uno más personalizado. Sin embargo, hay precisado que aún queda mucho por hacer. “La tendencia está en pasar de la quimioterapia al tratamiento molecular, lo que permite que el tratamiento sea cada vez más personalizado”, explica. Además, ha recordado que se están obteniendo avances en el área de inmunoterapia, “al utilizar el sistema inmunológico como herramienta terapéutica”. |